Preguntas
al descolgar el auricular.
¿Quién eres?
Pregunto
al desconocer tu identidad.
Soy tu primo.
Yo no tengo primos.
No de tu edad.
Ni siquiera tengo
a nadie
lo suficientemente interesado
como para hablar
conmigo
a estas horas tan -relativamente-
tempranas.
Se hizo el silencio.
Un silencio efímero y eterno
por partes iguales
mientras tu mente recordaba
esos momentos
que unieron nuestras vidas
en el pasado.
Me he equivocado.
Dices.
Ya nada importa.
Supe quién eras desde el principio de tu llamada.
Cuelgo el teléfono.
No hay nada de qué hablar.
Por este tipo de cosas los bloqueos preventivos de los números de los ex en los móviles funcionan tan bien :p
ResponderEliminarEs fuerte haberlo oído... que quede solo en un recuerdo.
ResponderEliminarUn beso y gracias por visitar mi blog